Por consiguiente el perfil de salida de la persona que queremos formar en nuestra institución es aquella que:
1. Se conoce, se valora, se cuida y desarrolla hábitos saludables.
2. Se desarrolla de forma cognitiva, emocional y ética.
3. Conoce y articula los principales contenidos de la fe cristiana, y construye su propio proyecto de vida, a la luz del Evangelio.
4. Es capaz de comprender de manera crítica, responsable y solidaria y solidaria al mundo que le rodea, adaptándose con éxito a diferentes realidades y a los procesos de cambio que en ellas pudiesen darse, desde un enfoque creativo, innovador y emprendedor que permita integrarse en el mundo laboral de forma constructiva.
5. Posee inteligencia intrapersonal para gestionar las emociones, así como interpersonal para establecer relaciones y vínculos afectivos positivos.
6. Tiene un adecuado conocimiento cultural que le permite interpretar el mundo con sentido crítico y participar en su desarrollo mediante nuevas creaciones culturales, artísticas y científicas.
7. Es capaz de comunicarse, trabaja en equipo y coopera con los demás para ejercer una ciudadanía global activa y comprometida, basada en los valores de convivencia democráticos.
8. Experimenta una comunidad educativa con valores inspirados en el Evangelio y tiene la opción de encontrarse con Jesús y descubrir a un Dios personal con quien se puede relacionar.
9. Hace uso de las nuevas tecnologías informáticas y telemáticas de manera responsable.
10. Vive la vida con orientación vocacional, siendo capaz de discernir con un sentido ético, equitativo e inclusivo.